La nueva regulación “no da subvención ninguna, sino herramientas para defenderse”.
El Consell de Govern Balear ha aprobado el proyecto de Ley Agraria, una norma dirigida a compensar a los payeses por la conservación del territorio mediante el impulso de nuevas actividades como los alojamientos de agroturismo y las tiendas para la venta directa de los productos de las fincas.
Para el conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, “se tiene que reconstruir y revalorizar el patrimonio rural”, mostrado su confianza en que la ley se apruebe antes de fin de año para entrar en vigor en 2015 en paralelo a la nueva Política Agraria Común (PAC).
Company recalcó que la nueva regulación “no da subvención ninguna, sino herramientas para defenderse”, ha resaltado Company en alusión a los payeses, que podrán cambiar de uso las edificaciones agrarias, de las que las anteriores a 1991 serán consideradas automáticamente legales.
El conseller ha insistido en que la normativa no implicará un desarrollo urbanístico residencial en suelo rústico, porque las reformas y cambios de usos limitarán los volúmenes en función de las edificaciones preexistentes.
A su juicio, “es justo compensar a quienes durante años han mantenido las explotaciones agrarias” con la posibilidad de completar sus ingresos con actividades como la venta directa, que tendrá que ceñirse a los productos propios y no ocupar dependencias superiores a los 150 metros cuadrados.
Además, las “agrotiendas” significarán un estímulo para la industria agroalimentaria y el desarrollo de sectores en expansión como el enológico y el oleícola.
Otro de los aspectos novedosos de la futura ley es la creación de cotos para regular la recogida de setas, caracoles o espárragos y permitir que los propietarios de tierras obtengan beneficios económicos de estas actividades tradicionales.
El conseller ha hecho hincapié en que en los últimos años se ha perdido el respeto a los propietarios de fincas por parte de algunos aficionados a la recolección de setas o caracoles.
En el desarrollo de usos complementarios al agropecuario tendrán mayores ventajas los titulares de “explotaciones agrarias preferentes”, figura creada para dar mayores facilidades a los payeses cuyos ingresos proceden mayoritariamente del trabajo del campo.
La futura Ley Agraria regula también la explotación de áreas forestales para producir energía a partir de la biomasa, el riego con aguas regeneradas y la consideración específica del sector equino, que según Company no solo no es una actividad “para señoritos”, como a su juicio piensan algunos, sino un área cuyo desarrollo puede resultar estratégico para el campo balear.