PERO HA GENERADO “ENORMES” PÉRDIDAS AL SECTOR.
La consejera de Agricultura del Gobierno de Canarias, Pilar Merino, reconoció que la polilla del tomate, tuta absoluta, ha producido “enormes pérdidas” en Gran Canaria, sobre todo en el municipio de La Aldea, pero “afortunadamente” está controlada.
Merino respondía así a una pregunta formulada por el diputado del PP, Miguel Jorge Blanco, en Comisión Parlamentaria celebrada la pasada semana. La consejera comenzó diciendo que este era un problema de ámbito nacional: “es un insecto que se introduce en el fruto y genera graves daños“, dijo a los parlamentarios.
“En el momento en el que se descubrió en Valencia se puso el grito en el cielo. La polilla tuvo oportunidad de entrar con una partida que tenía restos en la época que se importa a Canarias, a pesar de que hay protección aduanera vegetal para el Archipiélogo“, informó.
Además, aseguró que se han producido unas “pérdidas tremendas” y ha obligado a la limpieza de parcelas, así como a la instalación de mallas limpias en los invernaderos y la aplicación de trampas de feromonas para atrapar las polillas.
En cuanto a la situación actual, se han controlado las plagas en La Aldea y la incidencia en el sur de la isla “no es importante”, pero se están tomando medidas como la instalción de nuevas mallas en las que la administración canaria está colaborando.