LA DECLARACIÓN COMO ZONA REMOTA PERMITIRÁ A LOS GANADEROS ISLEÑOS REDUCIR LOS COSTES.
Los gobiernos de Canarias y España han iniciado los trámites para que la declaración del Archipiélago como “Zona Remota” permita disminuir los costes derivados del tratamiento de los subproductos animales no destinados al consumo humano, cuyo coste en Canarias es quince veces superior al peninsular en el caso del ganado caprino y ovino.


La legislación actual avala la situación de Canarias para ser declarada Zona Remota que dará una respuesta lógica a los problemas que crea la insularidad, la lejanía, o la dispersión de la cabaña ganadera. Además conlleva un sobrecoste para las tareas de recogida y destrucción de cadáveres generados en las explotaciones ganaderas, que suponen en el caso del ganado caprino u ovino un coste por cabeza de 2,36  euros en Canarias, frente a los 0,16 euros de Cataluña.

Para la definición de Canarias como “Zona Remota”, el Archipiélago cumple con el criterio de dicha norma, que hace referencia a que en las Comunidades Autónomas insulares, podrá hacerse esta declaración ante la ausencia de plantas de transformación o incineración adecuadas o suficientes para el tratamiento estos subproductos.

La situación que vienen padeciendo los ganaderos isleños para dar cumplimiento a la normativa de la UE, a la que se añade el incremento constante del coste de los insumos, había sido denunciada en reiteradas ocasiones por el gremio.

Los responsables de las negociaciones creen que antes de finales de año esta declaración sea efectiva.