CADA VEZ SON MÁS LOS SUBSECTORES QUE SOLICITAN UNA CUOTA MAYOR DEL MISMO.
El Programa de Opciones Específico por la Lejanía e Insularidad (Posei) ha cumplido ya 17 años de existencia, con el objetivo de mitigar carencias estructurales, el aislamiento y problemas de transporte de los territorios de ultramar.
El Posei está constiuido por dos ejes principales: el Régimen Específico de Abastecimiento, REA, y las Ayudas a la Producción Local. En estos casi 18 años, el Posei no ha alcanzado su mayoría de edad sin generar conflictos.
Durante este tiempo el gran beneficiado del reparto de estos fondos, de manera muy considerable, ha sido el subsector platanero. Sin embargo, son muchos los restantes subsectores que solicitan una cuota mayor de este programa.
Recientemente ha sido el subsector del tomate el que ha exigido un aumento de la cuota, para garantizar la pervivencia del mismo y de cerca de unos casi treinta mil empleos.
En esta ocasión es el subsector de la viticultura el que alza la voz solicitando un incremento de las ayudas del Posei, pasando de los 600 euros por Ha. actuales, a los 1.700 euros que ya se distribuyen entre otros viticultores de Regiones Ultraperiféricas como Azores o Madeira.
Ha sido la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias, Avibo, la que ha solicitado a la consejera de Agricultura, Pilar Merino, que defienda ante Bruselas el aumento de las ayudas de los viticultores canarios.
Juan Jesús Méndez, presidente de Avibo, declaró que la reivindicación que la han transmitido al Gobierno de Canarias para mantener a flote el subsector, pasa por el pago de 1.700 euros por hectárea de viña y que se grave un 15% la importación de vino.
De no ser así –señala Méndez- peligra la actividad de 16.000 viticultores y unos 300 bodegueros de Canarias que ocupa el 36% de la superficie cultivada y que desempeña un papel ambiental y paisajístico de primer orden.
Avibo también ha solicitado al ejecutivo regional la modificación del Aiem, Arbitrio sobre la Importación y Entrega de Mercancías, para que se grave en un 15% la importación de vinos que actualmente entra sin ningún tipo de imposición, añadió Méndez.
En este sentido el presidente de Avibo manifestó que los viticultores y bodegueros canarios deben soportar una gran carga fiscal, a través del Aiem, al importar las botellas, los corchos, las cajas de cartón y la impresión, lo cual no nos parece mal, pero que nos permita estar en igualdad de condiciones.
Canarias consume 60 millones de litros de vino al año, de los que solo cuatro se producen en el Archipiélago. Según Avibo, lo normal es que un vino producido en una región cope el 30 por ciento del consumo en el mercado local. Sin embargo, en el caso de los vinos canarios solo se llega hasta el 14 por ciento de la cuota de mercado.
Llegados a este punto es dónde los subsectores que no son el plátano se preguntan: ¿está realmente la figura del Posei protegiendo y poniendo en igualdad de condiciones las producciones de la RUP, o estas partidas solo sirven para incrementar las ganancias de plataneros y producciones del continente?
La polémica está más que servida. Lo difícil será averiguar cuánto tardarán el resto de subsectores en solicitar la parte correspondiente para ser competitivos en igualdad de condiciones y no desaparecer fagocitados por la casi “libre y a bajo coste” disponibilidad del mercado regional.