Actualmente, los vientos están a un nivel nunca antes visto en los registros observados, que se extienden hasta la década de 1860.
Una nueva investigación ha descubierto que un rápido calentamiento del Océano Atlántico, probablemente causado por el calentamiento global, ha dado un impulso a los vientos alisios del Pacífico Ecuatorial.
El incremento de estos vientos ha causado el enfriamiento del Pacífico tropical, aumentando la sequía de California, Estados Unidos, elevando el nivel del mar tres veces más rápido que el promedio mundial en el Pacífico occidental y frenando el incremento de las temperaturas superficiales medias globales desde 2001.
Incluso, puede ser responsable de que los eventos de ‘El Niño’ sean menos comunes en la última década por su impacto en el enfriamiento de las temperaturas superficiales del mar en el Pacífico oriental.
“Nos sorprendimos al encontrar que la causa principal de las tendencias climáticas del Pacífico durante los últimos 20 años tuvo su origen en el Océano Atlántico”, afirma el coautor principal, Shayne McGregor, del ‘ARC Centre of Excellence for Climate System Science (ARCCSS)’ de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Sydney, Australia. “Se pone de relieve cómo los cambios en el clima en una parte del mundo pueden tener amplias repercusiones en todo el mundo”, añade.
Hasta ahora, el aumento sin precedentes en los vientos alisios del Pacífico ecuatorial durante los últimos 20 años había desconcertado a los investigadores. Inicialmente, se pensó que esta intensificación de los vientos alisios era una respuesta a la variabilidad del Pacífico, pero la fuerza de los vientos era mucho más poderosa de lo esperado debido a los cambios en la temperatura superficial del mar Pacífico.
[quote]Otro enigma de la investigación anterior indica que bajo escenarios de calentamiento global, los vientos alisios del Pacífico Ecuatorial se ralentizarán en el próximo siglo.[/quote]
La solución se encuentra en el rápido calentamiento de la cuenca del Océano Atlántico, que ha creado diferencias de presión inesperadas entre el Atlántico y el Pacífico, produciendo anomalías en los vientos que han dado un impulso adicional a los vientos alisios del Pacífico Ecuatorial.
“El rápido calentamiento del Océano Atlántico creó zonas de alta presión en la atmósfera superior sobre esa cuenca y zonas de baja presión cerca de la superficie del océano”, explica el profesor Axel Timmermann, colíder y autor correspondiente de la Universidad de Hawai.
“Finalmente, las parcelas de aire ascendentes sobre el Atlántico se hunden en el Pacífico oriental tropical, creando una mayor presión de la superficie allí. La enorme presión vista con la alta presión en el Pacífico y la baja presión en el Atlántico dio un impulso extra a los vientos en el Pacífico, amplificando su fuerza”, agrega.
Mientras están activos, los vientos alisios ecuatoriales más fuertes dan un gran revés al agua en el Pacífico Occidental, llevando más calor atmosférico al océano, como mostró el coautor e investigador jefe de ARCCSS Matthew England a principios de este año.
Esto parece explicar gran parte de la reciente desaceleración de la subida de las temperaturas superficiales medias globales.
Es importante destacar que los investigadores no esperan que la diferencia de presión existente entre las dos cuencas oceánicas dure. “Va a ser difícil de predecir cuándo terminarán la tendencia de enfriamiento del Pacífico y su contribución a la pausa global en las temperaturas superficiales– añade England–.
Sin embargo, un gran evento de El Niño es un candidato con potencial para impulsar el sistema a una situación más sincronizada de calentamiento del Atlántico/Pacífico”.