Quince pinzones azules incorporan este dispositivo para evitar su extinción.
Esta especie es un fringílido endémico de Canarias cuya población está en grave riesgo de extinción en la Isla al perder su hábitat, por lo que el Cabildo de Gran Canaria ha trabajado para su repoblación y ha iniciado este nuevo método de seguimiento con la suelta de una quincena de ejemplares en la zona de El Cortijo de Huertas, en el marco del Plan de Recuperación del Pinzón Azul que desarrolla en colaboración con el Gobierno de Canarias.
El consejero de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, Juan Manuel Brito, quiso reconocer el trabajo que realizan los técnicos insulares, pues “gracias a ellos el Cabildo de Gran Canaria se ha convertido en una institución puntera en la conservación y recuperación de la fauna y las especies autóctonas”.
La responsable técnica del proyecto, Dolores Estévez, explicó que la suelta de ejemplares con radiotransmisores tiene como objetivo estudiar el movimiento de las aves para saber si permanecen en el área o regresan a Inagua y, en ese caso, qué ruta siguen, lo que ayudará a decidir qué zonas reforestar.
El Plan de Recuperación del Pinzón Azul de Gran Canaria prevé la creación de varias subpoblaciones de pinzones para unirlas, posteriormente, a través de pasillos arbolados.