El informe presenta el grado de cumplimiento de los objetivos internacionales para 2015 en relación con el hambre.
En la edición de ‘El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo’ de este año, se hace balance de los progresos realizados hacia la consecución del primer Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM 1) y el objetivo de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, establecidos por la comunidad internacional en relación con el hambre.
Además, se reflexiona sobre lo que debe hacerse todavía, mientras se prepara la transición a la nueva agenda para el desarrollo sostenible después de 2015.
[quote]En el informe se examinan los progresos hechos desde 1990 en todos los países y regiones, así como en el mundo en su conjunto.[/quote]
Los progresos hacia la meta del ODM 1, sin embargo, se evalúan no solo mediante la medición de la subalimentación o el hambre, sino también mediante un segundo indicador, a saber, la prevalencia de la insuficiencia ponderal entre los niños menores de cinco años.
Se comparan los avances realizados en distintas regiones y a lo largo del tiempo en relación con los dos indicadores, a fin de arrojar luz sobre la complejidad de la seguridad alimentaria.
Pese a los progresos generales, queda mucho trabajo por hacer para conseguir erradicar el hambre y lograr la seguridad alimentaria en todas sus dimensiones.
En el informe del año 2015 no solo se facilitan estimaciones de los progresos ya realizados, sino que también se señalan los problemas restantes y se proporciona orientación sobre las políticas en las que debería hacerse hincapié en el futuro.
Asimismo se indican los principales factores que han determinado el éxito hasta la fecha en la consecución de los objetivos relativos a la seguridad alimentaria y la nutrición.
La lista de factores —el crecimiento económico, el crecimiento de la productividad agrícola, los mercados (incluido el comercio internacional) y la protección social— no es en absoluto exhaustiva. En el informe se muestra también que las crisis prolongadas, causadas por conflictos o por catástrofes naturales, tienen efectos nocivos sobre los progresos en la reducción del hambre.
Puedes descargarte el informe aquí.