Y UN IMPORTANTE PROBLEMA PARA LOS PRODUCTORES DE HORTALIZAS
Los tomates son una parte esencial de la dieta europea. El británico promedio come más de siete kilos de tomates frescos cada año, mientras que en el sur de Europa el consumo anual se eleva a más de diecisiete kilos por español y treinta kilos por italiano.
Los mayores productores de Europa son Italia (más de 6 millones de toneladas al año) y España (alrededor de 4 millones de toneladas al año). En el conjunto de la UE la producción es de unos 17 millones de toneladas.
Sin embargo, a la par que aumentaba la producción, se extendía desde las subregiones tropicales su peor enemigo: la Bemisia Tabaco. Esta especie tiene varios biotipos (que comparten el mismo genotipo) y se ha vinculado con la difusión de más de 110 virus.
Entre los peores virus que transmite la mosca blanca figura el tomato yellow leaf curl virus (TYLCV) y el similar tomato yellow leaf curl virus sardinia (TYLCSV).
Estos virus causan grandes pérdidas económicas en los cultivos y reducen el rendimiento de las producciones, al que también se suma el tomato chlorosis virus (ToCV) que reduce el crecimiento de frutas y causa retrasos en la maduración.
Los expertos consideran que las diversas mutaciones que está experimentado la mosca blanca traerá aparejados nuevos virus, para los que será más difícil encontrar tratamientos adecuados.
Actualmente la mosca blanca se combate con insecticidas, empleo de jabones, control y lucha biológica y cerramientos de cultivos más efectivos. Sin embargo, la mejor arma que se ha encontrado hasta el momento es la prevención.
Los daños que provoca la mosca blanca a los cultivos pueden llegar a suponer la ruina de su productor. Es por ello, por lo que la comunidad internacional comienza a realizar esfuerzos para tratar de erradicar una de las peores plagas que se ha conocido y que afecta a la cadena alimentaria mundial.