Esta campaña han duplicado la producción llegando a los 1,1 millones de bultos.
Fundada hace más de 60 años por Cristóbal Pérez Hernández y sus hermanos, esta empresa familiar ha logrado mantenerse fiel a sus principios adaptando el negocio a las demandas de sus clientes y a las vicisitudes que han afectado al tomate canario de exportación.
Con el relevo generacional, son los hijos de los fundadores quienes continúan la actividad en el municipio de Santa Lucía de Tirajana, donde cultivan 37 hectáreas de tomate de exportación. Salvador Pérez, que ejerce las funciones de gerente, explica que en la empresa ‘todos hacen de todo’, según lo que sea necesario en cada momento.
Para Salvador esta es la única posibilidad de saber qué sucede en cada momento y poder solucionar los problemas allí donde se van generando. La incorporación de cambios en los invernaderos y en sistema de producción, han disminuido mucho las incidencias, hasta el punto que duplicar la producción casi se convierte en otro ‘problema’.
Desde Nicolases manifiestan su satisfacción por haber alcanzado, por primera vez desde que se creó la empresa, el millón de bultos o lo que es lo mismo, seis millones de kilos de tomates exportados. Si añadimos la fruta que se desecha por motivos comerciales, seguramente los millones de bultos y kilos aumentarían de manera considerable.
Al preguntarle por los motivos que han permitido batir este récord, Salvador responde inmediatamente que se debe al cambio de mallas. Otros factores como el clima que ha habido esta campaña o la adaptación de la técnica del descuelgue también han tenido algo que ver, pero lo determinante ha sido la sustitución de mallas por otras más tupidas de 10 x 20.
La afección de plagas no solo nos mermaba la producción, la calidad de la fruta sino que además nos obligaba a finalizar la campaña mucho antes. El cerramiento nos ha beneficiado a este respecto, si bien al tener menor ventilación, ahora las incidencias se producen por concentración de humedad, señala Salvador Pérez.
Nicolases emplea a unas 200 personas entre cultivos y almacén de empaquetado en los momentos pico de la zafra. Los últimos cambios, además de incrementar la producción, han permitido el aumento del rendimiento por superficie, batiendo nuevas marcas en el histórico de la empresa.
La satisfacción en Nicolases es generalizada, no solo por lo que supone batir un récord histórico, sino por la comprobación del éxito de los resultados, producto de los cambios aplicados.
Nicolases también ha apostado por la diversificación de la producción y ha destinado tres hectáreas a la producción de plátano. Tras el verano esperan recoger la primera cosecha.