Hasta el 90% de las especies marinas de Canarias se han perdido en el curso de los últimos cuarenta años como consecuencia de la sobrepesca.
Así lo han advertido Ricardo Haroun y José Juan Castro, miembros del grupo de investigación de Biodiversidad y Conservación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
“Nos queda el 10% de los que había en 1970. Aunque existe un control de esta actividad, no es suficiente, es necesario incrementarlo desde el punto de vista de la cantidad” -afirman los investigadores.
Haroun y Castro participan en Poseidón, un programa de ciencia ciudadana impulsado por la ULPGC en el que cualquier persona puede aportar datos de las especies marinas que ve en Canarias, con el fin de registrar y evaluar los cambios que están sucediendo a nivel de los ecosistemas y comunidades como consecuencia de la acción humana (pesca, destrucción o alteración de hábitats…) y del cambio climático.
Ricardo Haroun calificó las observaciones que vienen desarrollando los colaboradores de muy valiosas para la investigación y conservación de la biodiversidad marina en Canarias. “No sólo nos permite conocer qué, dónde y cuándo se ven las diferentes especies, sino que además permiten detectar qué deja de verse en una época del año o en una zona determinada” -aseguró.
“Este tipo de información permite detectar cambios la distribución y abundancia de las especies, ya sean estacionales o interanuales”, señaló el codirector del Programa Poseidón.
Según el investigador José Juan Castro, coordinador de validación científica del programa Poseidón, en los últimos seis meses se han contabilizado entre diez y doce nuevas especies gracias a la colaboración ciudadana. “Están apareciendo especies como el cirujano que hace nada era muy anecdótica, y ahora han habido capturas de 40 o 50 kilos en Melenara de estas especies que no eran de aquí. Gracias a este tipo de registros podemos ver la expansión que está ocupando estas especies y como se están distribuyendo”.
Además, el programa Poseidón ha lanzado una iniciativa más concreta sobre los angelotes, una especie de tiburón de fondo que sólo en Canarias está teniendo capacidad de reproducirse y de mantener poblaciones estables, según avanzó Haroun.
La Zoological Society of London y la ULPGC han presentado un proyecto conjunto para la conservación del angelote en las Islas. “El último reducto de esta especie en Europa se localiza en Canarias, aunque también aquí se encuentra amenazado”, apuntó Castro.