LOS TÉCNICOS HAN CALCULADO UNA PÉRDIDA EN TORNO A LAS CUATRO MIL PLANTAS.
El rigor del verano se ha dejado sentir en las primeras plantaciones que se vienen realizando desde hace unas semanas en el municipio de La Aldea.
La juventud de la planta, de escasos quince centímetros, y temperaturas que han alcanzado los 45ºC, con el consiguiente estrés hídrico, han provocado la pérdida de unos cuatro mil ejemplares de plantas.
A la temperatura se unió el aire caliente que, si bien las rachas no produjeron ningún desperfecto a las infraestructuras, terminó afectando de manera directa a las recientes plantaciones.
Los técnicos consideran que las circunstancias climáticas extremas podrían haber causado un daño mayor. Sin embargo, seguir las indicaciones para evitar la pérdida de la planta han permitido reducir la incidencia.
Es por ello por lo que los técnicos recomiendan encarecidamente practicar las instrucciones para el manejo de los cultivos en uno de los momentos más sensible para las plantas.
El estado de las plantaciones se encuentra a un cincuenta por ciento, estimándose que el cincuenta por ciento restante haya finalizado durante la primera quincena de septiembre.
Además del calor, el agua es el elemento que más preocupa a los agricultores en este momento. A pesar de realizar todos los esfuerzos para garantizarla, la disponibilidad de la misma a precios asequibles, repercutirá en la rentabilidad de una campaña que comienza con los incumplimientos de las administraciones.
Y es que, pese a los acuerdos, apoyos y mociones parlamentarias, nada se ha movido en torno a las demandas del sector, de unas deudas y compromisos que las administraciones y sus responsables insisten en quebrantar reiteradamente.