El municipio quiere incorporarse a la Ruta del Almendro y solicita al Cabildo 200 árboles para su expansión.
La finca de El Viso, propiedad del Cabildo Insular y gestionada por el Ayuntamiento de Telde, ha ido transformando en esta legislatura parte de sus cultivos, donde las vides eran el producto estrella, por otros como las higueras, los morales y más recientemente, las lechugas, calabacines y otras hortalizas y verduras.
Sin embargo, también hay espacio para la flora con el cultivo de strelitzias y de próteas. La producción agrícola se destina a las parroquias, Servicios Sociales y al Banco de Alimentos y en la finca trabajan una veintena de desempleados, la mayoría mujeres, un capataz y un ingeniero técnico agrícola.
La concejala de Agricultura, María González Calderín, explicó que desde la corporación municipal se apuesta por implantar nuevos cultivos y el del almendro es uno de los preferidos. “Nuestra idea es integrarnos en la Ruta del Almendro que promociona el Cabildo y por ello hemos solicitado que nos envíen 200 ejemplares, 100 para cultivarlos en El Viso y 100 para los agricultores del municipio que estén interesados”.
González Calderín, cree que “una futura arboleda de almendreros daría un aspecto espectacular a esta zona de la finca”. En este mismo terreno se están cultivando lechugas de cuatro variedades: candela; la romana, con la variedad Cervantes; cogollos de Tudela, variedad Lucena y escarola, variedad Madrás.
El cultivo se realiza con el mulching (acolchado), que supone un ahorro de agua, evita que abunden las malas hierbas e incorpora abono orgánico. Es un cultivo que sale rápido”.
Otras producciones en El Viso son los morales, las higueras, calabacines y acelgas, entre otros, aunque la vid no se ha abandonado. Según la concejala de Agricultura, “hemos dejado de producir vino porque éste luego no estaba a la venta; se usaba solo para actos oficiales, pero su gasto de agua era muy importante y, además, la bodega que se encargaba de su elaboración quería cobrarnos y creemos que es mejor usar ese presupuesto en formación y promoción.
Las uvas las llevamos a Servicios Sociales para que las distribuya en sus programas para los más necesitados”. Este año, según el ingeniero agrónomo, se podrá recoger sobre unos 1.500 kilos de uva.
Otra característica de El Viso es que mucho material procede del reciclado, como es el caso de la puerta del huerto de las strelitzias, hecha con las maderas de las sombrillas de las playas de Telde. Y son precisamente las strelitzias uno de los ejemplos que pone González Calderín para demostrar que esta finca, de cuatro hectáreas de superficie, es rentable y ayuda al ajuste de las cuentas municipales.
Según la concejala, “estas flores, que son bastante caras, junto con las próteas, se usan para elaborar centros de flores para actos del Ayuntamiento, y aunque no sean grandes fortunas, algo ayuda el no tener que comprarlas”. Además, se ha solicitado al Cabildo que cuando se quiten los cortafuegos del verano se use la madera para reponer la madera podrida en El Viso.
Sobre la función de la finca, la concejala de Agricultura señaló que hay dos propuestas: que sea un centro de formación agraria o un taller de empleo de agricultura. “Hay instalaciones que se pueden usar para estos fines y sería bueno que El Viso siga con su gran labor”, añadió.