Así lo expuso en la apertura de la Jornada Mundial de la Agricultura Social.
El expresidente de Uruguay José Mujica defendió en la Exposición Universal de Milán, la necesidad de reducir los intermediarios comerciales y vender directamente al consumidor para fomentar una agricultura más social.
“Los productores pequeños logran sobrevivir y hasta prosperar (…) porque ahorran eslabones en la cadena y crean formas de vender directamente al consumidor”, dijo Mujica en su discurso de apertura de la Jornada Mundial de la Agricultura Social.
Explicó que los grandes grupos económicos y las cadenas de distribución “cada vez llevan un peso más grande en el ingreso de la agricultura, ingreso que no necesariamente está en proporción con el trabajo de los agricultores”.
Son los que trabajan la tierra “los que reciben menos” y, por eso, subrayó en la Expo dedicada a la agricultura, cómo disminuir intermediarios e ir directamente a quien consume, lo que haría sostenible el trabajo en el campo.
Además, apoyó medidas como fomentar la presencia del Estado, ofrecer más créditos y favorecer una mejor organización para beneficiar a los pequeños productores, con los que los Estados y las empresas privadas deberían comprometerse.
“Sigo siendo agricultor en alguna medida y les puedo decir que hace muchos años, antes de ser legislador, habría optado por tener un camioncito e ir directamente a la gente, porque habría llegado a la conclusión de que los empresarios se llevan gran parte”, agregó.
Para lograr una agricultura sostenible dijo que “hay que pedirle a las universidades que hagan esfuerzos” y apoyen la agricultura a pequeña escala, porque “no todo en este mundo tiene que ser gigantesco”.
En este sentido, defendió que “la tierra todavía tiene connotaciones artesanales” y, aunque la productividad se puede alcanzar “sumando y sumando capital, llega un momento en el que inevitablemente tienes que sumar humanidad. Si eres humano, no puedes sustituir al hombre solo con capital”.
También estimó necesario implantar en el campo la tecnología adecuada y resolver los problemas de comunicación y transporte de las zonas rurales, mientras que recordó que el otro gran reto está en incorporar a las mujeres, porque “no puede haber agricultura si no hay mujer”.
“¿Quién va a cuidar el suelo de Italia? ¿Quién se va a ocupar de la sostenibilidad?”, se preguntó Mujica, convencido de que “el amor a la tierra”, unido a la inteligencia y el compromiso “puede llegar a hacer fértil las tierras”.
Afirmó que, aunque “el análisis catastrófico tiene una parte de razón”, el deterioro de la tierra se puede revertir si se trabaja “en la formación y en la defensa de la tierra”.
“Hace 50 años, el río Támesis era una cloaca. Ahora tiene pescaditos. Yo no los comería, pero dentro de 20 o 30 años, si se sigue con las medidas, probablemente ese pescadito se pueda comer”, concluyó.