El Cabildo ha solicitado a los agricultores, ante el riesgo de sequía, que no aumenten sus cultivos en las zonas agrícolas por encima de los 500 metros.
El Cabildo de Gran Canaria considera que el estado de las presas del sur de la Isla “es crítico” y alerta a los agricultores que no aumenten la superficie de los cultivos en las zonas altas de todo el territorio insular, ante la posibilidad de que no puedan ser regadas con las reservas de agua que quedan en los embalses.
El consejero insular de Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Miguel Hidalgo, explicó que tras seis años sin lluvias intensas en las medianías y cumbres de la mitad sur de la Isla, se ha generado una situación “bastante crítica” en las áreas agrícolas situadas por encima de los 500 metros sobre el nivel del mar.
Por tanto, Hidalgo anunció que “se invitará” a los productores a mantener la actual superficie cultivada, ya que existen reservas disponibles para regar la próxima cosecha. En cambio, si se amplían los terrenos plantados y no llueve con intensidad en los próximos meses, el Cabildo no podría garantizar el agua necesaria.
La sequía que sufre Gran Canaria, especialmente en la mitad sur de la Isla, ha reducido las reservas de los siete embalses del Cabildo al 16% de su capacidad, mientras que las presas privadas han bajado al 10%.
En Soria, Ayaguares y Fataga se han agotado las reservas y se encuentran prácticamente vacías, mientras que Chira y La Gambuesa están al 11% y al 37% de su volumen total, respectivamente.
Una avería en la estación capitalina de Barranco Seco, que desde hace un año envía agua depurada hacia las fincas de El Salobre y El Tablero de Maspalomas, obligó durante el mes de agosto a utilizar unos 200.000 metros cúbicos de Chira y La Gambuesa para regar los cultivos de esas zonas agrícolas del municipio de San Bartolomé de Tirajana.