EL DOCUMENTO SE LE TRASLADARÁ A LA MINISTRA DE MEDIO AMBIENTE, RURAL Y MARINO.
La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias, Pilar Merino, el consejero de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, Martín Soler Márquez; el consejero de Agricultura y Agua de la Región de Murcia, Antonio Cerdá Cerdá; y el director general de Innovación y Tecnología Agroalimentaria de la Generalitat Valenciana, Manuel Lainez Andrés, han firmado un documento en defensa del sector productor y exportador de tomate de España.
En el documento se solicita que no haya nuevas concesiones respecto a este cultivo en el actual Acuerdo de Asociación de la Unión Europea con Marruecos. Según destaca el texto, gracias al ventajoso acuerdo actual, en el periodo 2003-2008 las exportaciones de tomate a la UE procedentes de Marruecos evolucionan al alza, en detrimento de las españolas. El contingente impuesto por la UE al tomate marroquí ha venido siendo limitativo en general, si bien en las últimas tres campañas se ha visto ampliamente sobrepasado.
Por ello, remarcan que no debe permitirse en ningún caso que los contingentes se distribuyan por trimestres en lugar de por meses, pues esta flexibilidad puede provocar fuertes hundimientos de precios en determinados momentos, difíciles de recuperar. Solicitan, además, que se adecue y unifique el método de establecimiento del precio de entrada para garantizar la transparencia de las transacciones.
En la misma línea se han expresado el resto de productores de tomate de la Unión Europea, Bélgica, Francia, Holanda, Reino Unido y Polonia, que ya se han dirigido a la Comisaria Europea de Agricultura y Desarrollo Rural para expresar su preocupación por la evolución de las negociaciones con Marruecos, y han solicitado que no haya concesiones respecto al actual acuerdo.
Además, los productores españoles piden que se potencien y coordinen los controles aduaneros de los puntos principales de entrada del tomate marroquí a la UE para asegurar que se cumplen los acuerdos. Han de intensificarse los controles fitosanitarios y los relativos a la seguridad alimentaria de las mercancías procedentes de terceros países, para contribuir a la viabilidad de las plantaciones y garantizar la seguridad del consumidor.
Asimismo, instan a la Comisión Europea para que, siempre que se den las circunstancias previstas en el artículo 25 del vigente Acuerdo de Asociación, adopte las medidas de salvaguardia establecidas en el artículo 27 del mismo. Los firmantes creen que debería facilitarse a las Comunidades Autónomas el acceso a los datos de volúmenes de importación y de precios registrados en las aduanas de la UE.
Los productores piden estudios prospectivos sobre el potencial productivo marroquí y sobre la necesidad de diversificación productiva y de cooperación entre ambas orillas del Mediterráneo. Apuestan, asimismo, por incluir en el Acuerdo con Marruecos la exigencia de reciprocidad respecto a las condiciones de producción de terceros países (fitosanitarias, sociales, ambientales) para evitar pérdida de competitividad de los productores nacionales. En este sentido, piden que no se permita la entrada de frutas y verduras en cuyo proceso productivo se empleen materias activas cuyo uso esté prohibido en nuestro mercado interior.
El documento firmado destaca que España es el primer productor de tomate fresco comunitario, sector que tiene cierta importancia en países como Bélgica, Francia, Holanda y Polonia, y llama la atención respecto a que la economía y el empleo de un buen número de municipios de las Comunidades Autónomas de Andalucía, Murcia, Canarias, Comunidad Valenciana y Cataluña dependen de la producción y de la exportación de este producto.
En los últimos cuarenta años, agricultores y empresas vienen realizando una importante apuesta por la modernización y continuas inversiones, que han permitido mejorar su competitividad y posicionarse de forma sostenida en el mercado comunitario. Se apuesta por seguir en esta línea los próximos años de forma que se produzca una reconversión estructural del sector del tomate, para adecuar sus instalaciones a los actuales sistemas productivos que repercuta en la mejora fitosanitaria del cultivo, en la reducción de costes de producción y en la mejora de la calidad y de los rendimientos obtenidos.
El documento firmado será trasladado a la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Elena Espinosa