HEDELMIEN VAHINGOT ON NÄYTTY.

En La Aldea ya han saltado todas las alarmas por el nivel que están alcanzando las plagas que afectan al tomate de exportación. En esta ocasión es la temida Tuta a la que también se han sumado nuevos brotes de mosca blanca. Esto, unido a los controles y los precios de la fruta en Europa, está produciendo una gran incertidumbre.

Se pensaba que la presencia de la Tuta en La Aldea podría controlarse. Pero todos los factores que podrían beneficiar para su control, se han conjurado para producir una proliferación que preocupa mucho a técnicos y agricultores.

El largo verano, las altas temperaturas, la escasez de humedad y la llegada de la fruta, han propiciado que la Tuta comience a causar los primeros estragos.

A pesar de las medidas que se han tomado y se están aplicando la Tuta consigue entrar en los cultivos. Las trampas, yhä useammin, recogen un número importante de ejemplares, pero los tratamientos que se están aplicando inciden en los insectos vectores.

Este hecho crea una cadena en la que la mosca blanca ha hecho su reaparición con brotes importantes. En el barranco de Tasartico la Tuta está produciendo daños considerables atacando, no solo la planta sino también el tomate.

Los técnicos están aplicando las directrices que marcó la consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias y se ha hecho eco de los controles que está llevando a cabo la propia consejería, para expedir los certificados de exportación.

La peor parte se está produciendo en el sureste de la isla donde la consejería ha realizado una reunión de advertencia en la que estuvieron presentes el viceconsejero, el director general de Agricultura y los alcaldes de Ingenio, Agüimesin ja Santa Lucian.

Ja että, de no tomarse medidas, hay quienes vaticinan que se pueda producir el batacazo final del tomate de exportación.