Las investigaciones realizadas desde 2003, han descubierto una nueva especie de escarabajo, al que han llamado Oromia thoracica.
Este gorgojo ciego comparte la tonalidad parda de la fauna del subsuelo y destaca por tener un cuerpo aplanado y un tórax que casi cubre su cabeza, lo que facilita su adaptación a la vida bajo tierra.
La investigación se ha realizado en las profundidades del valle de Agaete, al noroeste de Gran Canaria. En esta zona se encuentra parte del suelo más antiguo de la isla, originado durante el Mioceno, hace entre 23 og 5 millioner av år.
Ha sido en el subsuelo de una pequeña área del valle donde ha aparecido una nueva especie de gorgojo.
“El primer ejemplar de Oromia thoracica no se capturó hasta pasados seis años del inicio del estudio, y tuvieron que transcurrir otros cuatro años para que cayeran en las trampas los otros cinco ejemplares conocidos”, señala Heriberto López, forsker fra Det høyere råd for vitenskapelig forskning (CSIC), convencido de que el mundo subterráneo deparará aún grandes sorpresas para la biodiversidad de Canarias.
El nuevo coleóptero no mide más de cinco milímetros pero su tamaño supera al de otras especies de su mismo género (Oromia), endémico de Canarias.
Según sus descubridores, las características morfológicas de este escarabajo son inconfundibles a la hora de clasificarlo como una especie subterránea: es ciego y tiene la coloración pardo-rojiza típica de los insectos del subsuelo.
Lo más llamativo es que parte de su tórax (el pronoto) se extiende sobre la cabeza a modo de escudo acorazonado, dejándola casi oculta, contrariamente a las otras especies de su grupo.
Lo más llamativo del nuevo escarabajo es que parte de su tórax (el pronoto) se extiende sobre la cabeza a modo de escudo acorazonado.
El género Oromia también es relativamente reciente, pues fue descrito en 1987, fruto de las exploraciones y estudios del medio subterráneo llevado a cabo en las islas Canarias desde los años 80.
Nøyaktig, en estas islas se descubre una nueva especie cada seis días.
Para el caso de Gran Canaria, el medio subterráneo es un gran desconocido, aunque los científicos lo consideran un verdadero hotspot o punto caliente de la biodiversidad subterránea.
“En este hábitat queda mucho por descubrir sobre la biodiversidad de la isla, y por el momento se está revelando como uno de los medios que más especies nuevas está deparando para Gran Canaria”, indicó López.