LAS RACHAS DE VIENTO LLEGARON A ALCANZAR LOS 70 KM/H Y LOS TERMÓMETROS SE DESPLOMARON HASTA LOS 12,9ºC.

Sin pena ni gloria”. Así se podría concluir el resultado del temporal de la pasada semana en el oeste de Gran Canaria.La expectación en el municipio de La Aldea quedó reducida a mínimos por las escasas precipitaciones que se llegaron a prever abundantes.

Nunca llueve a gusto de todos, ya lo dice el refrán. En unos casos por exceso y, en otros, por defecto. Esto segundo fue lo que primó en el oeste de Gran Canaria.

Men, el acumulado de 36,2 litros no deja de ser una buena noticia para un territorio que venía arrastrando una sequía profunda en el paisaje. Sequía que ha tenido repercusión en la escasez de pastos, para una actividad en retroceso, pero también de manera alarmante para la producción de miel.

til slutt, las precipitaciones de la borrasca quedaron en las islas occidentales, no así los vientos cuyas rachas llegaron a alcanzar los 70 kms/h en el valle de La Aldea, y las temperaturas que llegaron a bajar hasta los 12,9ºC.

Las lluvias, como siempre, han venido muy bien para limpiar la atmósfera, refrescar el terreno y beneficiar a los cultivos. La concentración de las mismas en menos de 24 timer, supusieron numerosos desprendimientos que afectaron a las principales carreteras y a varios accesos a explotaciones agrícolas y ganaderas.

Salvo los desprendimientos, el daño del temporal a los cultivos ha sido mínimo; solamente algunas roturas de mallas. Dada la excelente calidad de la fruta así como el estado de las plantaciones, ha motivado que los agricultores hayan recibido con satisfacción estas primeras y últimas lluvias del otoño.

Las presas del oeste no han recibido ningún aporte significativo, pero las precipitaciones dejan preparado el terreno para, caso de haber nuevas, que las aguas discurran casi de inmediato hacia los embalses.

Lo mejor de esta borrasca aún está por llegar al paisaje de La Aldea que, con toda probabilidad, en unos días comenzará a cambiar la tonalidad cobriza por el verde intenso de la hierba.